Ya teníamos ganas de publicar algo sobre este sitio que siempre que tenemos oportunidad frecuentamos. Aquí estuvimos cerrando nuestras vacaciones con unas raciones, justo el último día de nuestra estancia en Almuñecar. La verdad es que siempre que vamos acabamos encantados de su género y calidad, y en algunas ocasiones de su rapidez, que en este caso lució por su ausencia. Bien es verdad que a nuestro modo de ver era justificable ya que la Semana Santa había acabado y el personal era escaso por estar la mitad de descanso.
Bueno, vamos a lo que vamos. Podréis comprobar que pedir dos cañas, que eran dos vasitos de cerveza mínimos (e ideales por otro lado), te ponían estas dos tapas que veis, una con un adobo muy aceptable (cazón), y luego unos langostinos cocidos por ellos con muy buen sabor. No sé que pondrían en una tercera consumición pero con esto fue suficiente para colgar el plan que teníamos fijado de antemano (ir a una pizzería emblemática en la zona), y quedarnos a cenar en esta barra que tanto nos gusta.
Bueno, pues siempre que ves la carta te vuelves loco, así que fuimos a lo seguro. Para empezar pedimos su famosa ensalada de col. Ya os diré cómo se hace, pero es una ensalada de tiras de repollo macerada/aderezada con ajo (y pensamos que en otras veces ha llevado cominos), y un aceite de oliva de la zona con un sabor fuerte y pronunciado que de verdad que nos parece excelente para esta preparación. Es probar este sabor junto a la col, y es caer rendido a sus pies, pese a ser un aceite de oliva con demasiado carácter para mi gusto, que no para el de mi chica. Es un clásico pedir esta ensalada de acompañamiento al igual que las berenjenas rebozadas, aunque en este caso se trata de un desengrasante diferente e ideales para acompañar platos de pescado rebozado.
Pedimos aparte unos patas o rejos. Los rejos son las patas de la famosa pota que preparan fabulosamente en este bar. Ya en otro post os contaba como hacerlos en casa porque es económico y no tiene desperdicio. Fabulosos, increíbles, es lo mejor de lo mejor del mundo de la freiduría junto con el bacalao, los boquerones y los calamares. Todos ellos los preparan en el Lute y todos ellos son fabulosos.
Después pedimos la auténtica jibia a la plancha. ¡Guau!, esto es otra historia. Muchos sabréis que la jibia es una sepia (o choco) que por estas latitudes se llama así porque se captura allí, aunque sea lo mismo que la sepia. Se captura en estas costas desde Almería hasta Cádiz, y es más, yo de pequeño las he cogido alguna vez cuando buceaba (con escopeta) y recuerdo que en la propia playa del Calabajío se encontraban esa conchas calcáreas planas que tienen dentro (y que no tiene el calamar). Esto ahora es ciencia ficción.
Aquí, en Almuñecar, la jibia es la reina de los cefalópodos, además en la zona la preparan muy bien, a la plancha, rebozada, con patatas. Aunque hay que reconocer como mejor está a mi juicio es a la plancha. Si vais al Lute os daréis cuenta que la hacen divinamente (ver la foto), además es curioso como la sepia y la jibia vienen indicadas como dos raciones diferentes y eso tiene una explicación que ya antes os comentábamos. La jibia se vende como fresca, y esta sepia aquí tiene un hábitat ideal. Suponemos que la sepia que se ve por los bares será de fuera, de caladeros marroquís, asiáticos, congelada, no lo sabemos, pero es más grande y de menos calidad, y eso que en verdad se trata del mismo bicho.
La jibia estaba tierna y suave, y el ajillo estaba fantástico. Echamos de menos algo de alli oli, pero bueno, mejor, pese a no catarlo acabamos muy llenos y con esta salsa hubiéramos reventado. Las raciones eran muy grandes, no traíamos mucha hambre y el pan era muy bueno.
Y poco más que contaros, que con esto, un par de bebidas y un postre salís por unos 17€ por barba. Que son muy majetes y que el bar está algo apartado del centro (mejor), teniendo en cuenta que del centro al bar, hay sólo 8 minutos andando. Hay que ir pronto, porque si no olvídate. La gente acapara todo, sobre todo de lugareños (buena señal).
Creo que desde 1984 este bar está haciendo las cosas muy bien, y esperamos que no cambie nunca porque acabaría otro capítulo de aquella Almuñecar ideal.
Salud.
!Qué bien te cuidas!!!!
ResponderEliminarLas fotos hablan por si solas.
Un saludo, Begoña
Que bien acercarnos a casa información sobre este tipo de bares, que a veces no entras "por si acaso" Este tiene todo una ointa estupenda y una frescura... Hace mucho que no voy por Almuñecar. Oye: hoy es lunes y ya nos deseas buen fin de semana? Pues te quedan todavía unos cuantos dias, no?!!!!! No te preocupes se pasa volando!
ResponderEliminarUn beso
Carlos, en mi próxima visita a Granada me iré directo a Almuñecar. ¡Muy buen dato!
ResponderEliminarSaludos y buena semana
Ojú, qué hambre, y eso que acabo de desayunar. No hay nada como el pescaito de la costa andaluza. :-)
ResponderEliminarUn beso.
María.
Muy buena información! y las fotos hablan por si solas!! Así me gusta ir a mi!! lo que decimos de tapeo! Probar un poco to!!
ResponderEliminarUn beso!
Adi, tú siempre haciendo cosas tan ricas, y a la vez tan sanas, y encima sencillas... Con esas fotos, ese colorido... Guau. Tiene que estar para morirse ese feta al horno.
ResponderEliminarUn beso.
Begoña: un lujo de sitio, ya iré poniendo más platos a continuación cada vez que vaya.
ResponderEliminarCarmen: jajajaja... ya, es que este reportajillo en un principio iba a ser para el Viernes pasado. Muy bueno...
Sol: deberías... y las mejores fechas para visitar (que no bañar)en Mayo.
María: siempre intentamos cebarnos de pescado, ya que en Madrid comemos menos del que deberíamos.
Un saludo.
Jolín, como os pusísteis....!
ResponderEliminarQue rico todo. Me encanta el cazón con ese rebozado maravilloso y esa ensaladita de col que nos tienes que decir como hacerla, no te olvides.
Saludos,
Anna
Qué buena pinta tiene todo, y qué fotos.
ResponderEliminarSi voy por Almuñecar alguna vez ya sé dónde tengo que ir.
Un beso.
Anna: en breve, en breve jejeje.
ResponderEliminarLolah: no os arrepentiréis
¡Gracias a las dos!
Carlos, pues tengo que ir a este sitio. Cada verano pasamos por Almuñecar para llegar a Cabo de Gata desde Málaga. Hay otros caminos, pero el clásico de la costa es mi favorito. Haremos una paradilla para probar esos platos.
ResponderEliminarBesos
Hola Marta, pues si es verano ir con tiempo, es decir, si vais en la comida acercaros antes de las 13:00 y si es cena, pues... sobre las 20:45, si no es difícil encontrar sitio sentados.
ResponderEliminarHola Carlos,
ResponderEliminarLo de Granada y provincia con lo de las tapas es difícil de superar. Y de cómo fríen el pescadito en la costa mediterránea andaluza, inimitable.
Hace mucho tiempo que no voy por Almuñécar pero tus posts me están obligando a volver.
Saludos desde Córdoba
Hola Salmorejocordobés: yo ya no bajo como antes cuando pasaba por allí largas temporadas, por eso muchas veces cuando vamos, reconcentramos demasiado las comidas, cenas, BBQs, planes fijos, y por momentos las mini vacaciones se convierten en algo estresante dónde salimos saturados de comer y de beber.
ResponderEliminarClaro, quieres hacer de todo en 4 días y no te da tiempo.
Antes descansaba más como es lógico, y las vacaciones no pasaban tanta factura, todo lo contrario, había tiempo hasta para aburrirte, en el que muchas veces aprovechabas para dormir (que venía muy bien).
Un saludo.
Jo, es que no perdonas ni una!!! venga a picotear por ahí y como disfrutas!!!
ResponderEliminarMe alegro , eso es adquirir cultura culinaria que nos vas transmitiendo a todos los demás.
Un beso
Hola Dolors: no me cuesta nada jejeje, me lo pide el cuerpo, solo por recordarlo merece la pena. Saludos.
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