Hacía ya tiempo que tenía un poco aparcada la sección de las agua minerales del blog, y que mejor momento para retomarla que con el agua mineral alemana Apollinaris, quizás una de las mejores aguas con gas añadido de todo el mundo. Desde que la descubrimos hace más de 3 años en el Carrefour de Torrevieja, y le regalamos una botella a mi hermano, este agua no ha pasado desapercibida en la eterna búsqueda y localización de aguas minerales por las tiendas y supermercados de nuestro entorno. Y digo después de regalársela a mi hermano porque desde justo ese momento, el agua ha acaparado nuestra atención totalmente, hasta el punto de que por ejemplo mi hermano no ha parado de comprarla desde que la probó siempre que pasa por alguna gran superficie que la tenga (que no es fácil de encontrar). Y es más, la primera vez que se la encontró (no recuerdo ahora en qué tienda) compró todas las que había en el stand, que podrían ser unas 12 ó 15. Creo que todavía tiene alguna que otra almacenada en la fresquera de la casa del pueblo de mi padre.


Y es que después de descubrir hace tiempo el agua con gas Borsec, que quizás sea (para mí) la mejor agua con gas natural del mundo, Apollinaris sea su más fiel competidora dentro del marco de las aguas con gas internacionales, independientemente de si son carbónico añadido o son carbónico natural. Aunque mi hermano mantiene que Apollinaris no tiene nada que envidiar a esta famosa agua rumana Borsec, y quizás tenga razón. Y es que si nos los paramos a pensar, que el agua posea gas natural o no al gusto le importa poco, aunque claro, lo del agua Borsec es un fenómeno único en cuánto a proporción de gas (mirar el post que publiqué hace un año). De todas formas os imaginaréis que en esto de las aguas minerales hay mucha subjetividad y gustos.

Otra cosa luego es la accesibilidad y como no el precio. Borsec, que se encuentra quizás más fácilmente en los hipermercados y cuesta la irrisoria cifra de 1,10€ el 1,5l. En cambio el agua Apollinaris se presenta en formato de 1 litro (pero de vidrio que la verdad es que es mucho mejor) y es más compleja encontrarla, aunque su precio ronda los 1,30€ la botella. Así que Apollinaris es más caro en proporción, pero a su vez está mejor conservado. No sé, de ver las dos en una misma tienda, y sabiendo que no es realmente fácil encontrarlas, ¡creo que me llevaría ambas!.


Bueno, y en cuanto a su obtención, el agua mineral Apollinaris nace del manantial (hoy también spa) de la localidad germana de Bad Neuenahr-Ahrweiler. La historia de cómo se descubrió el agua es muy curiosa. En 1852, un viticultor llamado Georg Kreuzberg (foto abajo) compró en una subasta un viñedo en las cercanías de esta ciudad por sólo 15 táleros (antigua moneda de plata alemana). Aquí el hombre quería empezar a producir vino, sin embargo, y transcurrido un breve período de tiempo, las vides que plantó no crecían normalmente. Posteriormente descubrieron que la tierra poseía mucha acidez y entonces Georg ordenó acometer excavaciones en el lugar por un equipo de expertos descubriendo para su asombro que a 15 metros de profundidad, brotaba de entre las arcillas y las piedras, un agua mineral rica en ácido carbónico liberado éste por el enfriamiento de una capa inferior de magma. ¿Un manantial de agua mineral subterránea de la mejor calidad?, se preguntó, pues no dudó en optar por dejar el negocio de las viñas por explorar el manantial y explotarlo llamándole finalmente Apollinaris, tributo al santo del mismo nombre que es famoso por ser precisamente el protector del vino.


Al poco tiempo y junto al Dr. Gustav Bischof químico residente en Bonn, invirtieron una gran cantidad de tiempo y esfuerzo en investigar el propio acuífero de Neuenahr y pronto empezaron a explotarlo y a comenzar un negocio de venta de agua con esa ligera aguja, y de algo curioso que ya no se vende, arcilla con agua de Apollinaris (en tarro). Leo que en 1873 y tras la muerte de Georg, se fundó la empresa Aktiengesellschaft Apollinarisbrunnen vormals a Georg Kreuzberg y un año después, un tal Eduard Steinkopff (no he podido saber que le unía a Georg), alemán de nacimiento pero trasladado a Londres, recibe los derechos para la venta del agua en algunos países como artículo de importación. En 1878 este Steinkopf asume por fin todo el negocio internacional de las ventas y el de la propia empresa de Apollinaris Ltd. sitiada ya en Londres. En 1895 Apollinaris registra el logo y el eslógan (el triángulo rojo y el eslógan la reina de aguas de mesa "Queen of Table Water") como marca registrada.

Posteriormente, en 1900, Apollinaris ya se la conoce internacionalmente con unas ventas de 40 millones de botellas (rellenadas) al año, con unos beneficios muy holgados para ser de por aquel entonces. En 1956 la unión cervecera formada por Dortmunder, Schulthei & Brauerei AG compra todas las acciones de la empresa. Ya en 1991 se fusionan con Schweppes GmbH y en 2002 se vende al grupo Cadbury Schweppes. Y por último dos datos, en el año 2005 nace su web y en el año 2006 lo compra la todopoderosa Coca Cola.


Nosotros la verdad es que la hemos comprado menos que la Borsec porque en nuestra zona no es fácil encontrarlo (sólo algunos El Corte Inglés). El caso es que me lo paro a pensar y mi hermano nos ha regalado más botellas, que botellas hemos comprado por nuestra cuenta. Pero bueno, suficiente para deciros que es una agua exquisita, muy burbujeante, muy sabrosa (salada) y gruesa, como no gusta, sobre todo eso, por ser un agua saciante. Ideal para comidas pesadas, o para disfrutar de ella a cualquier hora. Tomarla siempre muy fría.


Os dejo un póster de un anuncio extranjero sobre la bebida, muy sugerente...


Salud y suerte en la lotería.