Hola amigos. Hoy por fin voy a contaros alguna cosilla del gran agua Vichy Catalán. Esta agua mineral de carbónico añadido única en España, y que tan buenos momentos nos ha hecho pasar en mi casa, en mi familia y en general en mi vida. Es quizás nuestra agua gasificada favorita de entre todas las que hemos probado, y considero que hemos probado alguna que otra. Además, desde que tengo uso de razón la consumimos siempre que nos acordamos (sobre todo de comprarla), pero sobre todo en las celebraciones importantes. Porque aunque cada vez es más sencillo verla en nuestra modesta mesa de los fines de semana o de algunos días de diario (¡porque el problema es que hay que traerlas!), es en esos momentos culinarios puntuales únicos en el año cuando nos damos cuenta de que es una bebida imprescindible en nuestro menú sea del tipo que sea. Y es que es tan versátil, tan única y tan refrescante, que forma parte ya de nuestra modesta historia culinaria, y de nuestra propia tradición familiar. Es un agua mineral prácticamente irreemplazable que nos ha enamorado desde que la probamos, porque es especial, porque es la mejor, y porque nos gusta y porque nos divierte, como decía aquella canción.


Además, me tengo que remontar en la memoria muy lejos para acordarme de una celebración familiar que no haya habido sobre la mesa este agua mineral, es algo que tenemos tan arraigado que a veces se ha convertido en toda una responsabilidad, es decir, nos gusta tanto que a lo mejor nos juntamos con 6 botellas en una comida, ya que todos compramos varias (y por separado) por si acaso falta, porque si faltaran....

Bueno, pues leo que la historia de Vichy Catalán es breve. Al parecer le debe mucho a un médico de hace un par de siglos, el Dr. Modest Furest i Roca, licenciado en medicina por la Universidad de Barcelona (1873). Su pasión por la hidroterapia (además de otras ramas), le hizo interesarse por el descubrimiento reciente por parte de un grupo de científicos de agua termal en Caldes de Malavella (Girona). Después de estudiar científicamente todas sus propiedades, adquiere el manantial en el año 1881, con lo que consigue que las aguas fueran declaradas de aguas de utilidad pública al poco tiempo (1883), y se planteó el embotellado. Así que leo que este doctor se propuso en dar a conocer la calidad del agua de Vichy Catalán consiguiendo esos famosos galardones que vemos plasmados en la etiqueta del envase. En 1889 se erigió el edificio de embotellado para su futura comercialización.



En 1890 se consiguió el registro de la marca y un año más tarde se aprobó el nombre de “Vichy Catalán”. Leo que el nombre comercial 'Vichy Catalán' se puso por razones publicitarias basadas en dos puntos, uno, las semejanzas existentes entre estas dos localidades Girona y Vichy, y dos, por las características finales de este tipo de agua mineromedicinal, que eran originarias de esta legendaria ciudad francesa. Qué sepáis que existen más spa termales de aguas Vichy distribuidos por el mundo, como en California (USA). Pues bien, al poco tiempo de embotellarse nuestro Vichy Catalán, el proyecto de construcción del balneario empezó a tomar forma hasta que fue acabado en el año 1904, constatando toda la hegemonía de la marca hasta el día de hoy.

Dicen que las propiedades del agua de Vichy son numerosas, ya la diferencia con otras aguas minerales es su contenido mineral y bicarbonatado (más de 2000 mg/l), que excede en cantidad a otras ofertas de aguas minerales. Por esto, se ha demostrado que es un agua alcalina muy eficaz para el tratamiento de afecciones como la hiperuricemia (ácido úrico) o la gota, como para afecciones estomacales y del tracto digestivo, que sin lugar a dudas ayudan hacer la digestión. También su contenido en flúor (huesos, caries etc) que es excepcional. Y el sodio, que su contenido es uno de los más elevados de todas las aguas minerales existentes en el mercado español (más de 1000mg/l). Se agua se extrae a 60º con algo de gas, aunque posteriormente se le añade más anhídrido carbónico.


Por último os señalaré que desde 1986, el grupo ha obtenido otras fuentes como las de Malavella y Mondáriz. Destaco que las aguas de Caldas de Malavella y Vichy son prácticamente iguales, pero el acceso a esta primera es más complejo en Madrid.


¿Sabíais que el agua de Vichy se utiliza también para cocinar? Pues sí, pero ya os digo, yo el único problema que le veo a comprar este agua mineral es que hay que cargar con ella desde el super (es verdad), porque por lo demás, es un agua que no tiene ningún contra, y sirve para todo. Ahora ¿cuánto pagar por una botella de Vichy Catalán? Pues por favor, menos de 1€, porque en algunos hipermercados que se publicitan como una opción clara de ahorro, aprovechan para meterte la clavada, y tú sin enterarte has pagado hasta 1,07€ por botella. Una pasada lo miréis por dónde lo miréis. Un buen precio sería 0,80€, aunque nosotros las adquirimos normalmente a 0,75€. ¿Dónde?. Pues si lo quieres saber ponerme un comentario en este post y os lo diré.


Pues nada más, que hablar de Vichy Catalán, es hablar de salud y hasta de la propia sed, porque este agua con gas es uno de los mejores remedios contra la misma.

Salud.